LA ESCUELA DE DIOS

“Arriba flojo que debes levantarte para ir a la escuela”,
Eran las palabras de Lidubino,  a su hijo Tavito.
-El niño se excusa diciendo: déjame dormir papa que hoy no iré a la escuela,
 ¿Por qué no vas a ir a la escuela?
El niño con un supuesto argumento  dice:
 “Porque las escuelas son muy peligrosas papito”
 Ya no encuentras que inventar para no ir a la escuela dice Lidubino:
 ¿Que tienen de peligrosas las escuelas? ¿De dónde sacaste eso? 
El niño afirma muy seguro:
Porque siempre en las calles cercanas a una escuela  hay una señalización que indica “Cuidado, peligro escuela”…

Los enemigos de nuestra alma  siempre pondrán señales de peligro  para que no acudamos a la iglesia no vamos s a la “Escuela de Dios” a aprender y crecer.
Su objetivo es claro al enemigo no le conviene que conozcamos a Dios,
-No quiere que busquemos  crecer en gracia y conocimiento de Dios.
Pedro uno de los maestros de la Escuela Divina nos dice:
“Antes bien, crezcan en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. A Él sea la gloria ahora y hasta el día de la eternidad. Amén. (2da Pedro 3,18)
Tú y yo somos como los niños que van a la escuela.
Tenemos que asistir a la Escuela de Dios, (La Iglesia)  para aprender  y proveernos de todo lo necesario para llegar a LA TIERRA PROMETIDA.
El enemigo te dirá al oído duerme, duerme no vayas a la iglesia
Dios también de muchas maneras te dira al oído:
 “DESPIERTA ES HORA DE IR A  LA IGLESIA, ES TIEMPO DE  APRENDER Y BUSCAR EL ALIMENTO QUE TE DARA VIDA ETERNA.
Despierta a tus amigos, comparte este mensaje.




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