CANTAR EN LA NOCHE

Hay dos pajaritos que son hermosos retratos del espíritu de una canción. Una es la alondra. Despierta por la mañana y saluda al naciente monarca del día con música. Todo su ser parece estallar en una canción.

El otro es el ruiseñor. Este pajarillo de color oscuro se esconde en los arbustos y no canta mucho durante el día. Pero tan pronto llega la noche, trina con su hermoso, tierno y conmovedor cántico nocturno.

En la esfera espiritual, igual que en el mundo de la naturaleza, los cantores diurnos son más numerosos que los nocturnos. Pero ciertamente que cuando más podemos glorificar a Dios, es cuando cantamos a pesar de la oscuridad.

No es difícil alabar al Señor cuando todo marcha bien, cuando disfrutamos de buena salud, cuando la familia es feliz y tenemos un buen empleo. Pero ¿qué sucede cuando llegan las pruebas? Cuando perdemos la salud, el dinero se gasta, las relaciones se destruyen o nos viene una tragedia, la realidad de nuestra fe es probada. Únicamente aquellos que están comprometidos con Cristo de todo corazón pueden tener un CANTO EN LA NOCHE.

Oración: Te alabo, Bendito seas Padre, Glorificado seas Jesucristo, Rey y Señor, Todo poderoso, Alfa y Omega, Pan de Vida, Luz del mundo, Gloria a ti León de Juda, Honor y victoria para Ti Jesús, el mismo de Ayer de Hoy y de Siempre, Gracias te doy por todos los momentos hermosos, te alabo por todos los momentos felices que me permitiste vivir, pero también quiero darte las gracias por estos momentos de tristeza, momentos de dolor, te doy gracias, por esta prueba que estoy pasando, gracias, Jesús Misericordioso por que creo y confió que si estoy contigo quien podrá vencerme? Gracias Jesús, por tu palabra, Gracias, por que se que ni las pruebas, ni las dificultades, los problemas, las persecuciones, el hambre, la falta de todo, ni los peligros, podrán separarme de TI. CREO Y CONFIO JESUS, que nada podrá separarme de tu amor, por que tu me amaste hasta el final, diste la vida por mi Jesús, Gracias, Jesús por que en todo saldré vencedor gracias a tu victoria en la Cruz, Gloria a Ti, ALELUYA, bendito seas, Te AMO JESUS. Amen.

¿Después de la noche que viene? El Día.

Así que ya no llores, sécate las lagrimas, por que así no podrás ver lo hermoso del nuevo día,

Levántate, ya llegó un nuevo amanecer en el cual tienes una segunda oportunidad, tienes un nuevo chance de volver a empezar y caminar por esta vida, ya no solo, sino acompañado con EL QUE ES EL CAMINO, LA VERDAD Y LA VIDA. ¡JESUS DE NAZARETH!.