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UN SOCIO IMPRESCINDIBLE

“En adelante el Espíritu Santo, el Interprete que el Padre les va a enviar en mi Nombre, les enseñara todas las cosas y les recordara todo lo que yo les he dicho” (Juan 14,26)

Toda historia tiene un comienzo,   con  alegría y emoción quiero contarles  como comenzó mi historia en la predicación.   Después  que entregue mi vida a Cristo, vinieron muchas lunas y soles en los  que estuve acudiendo  a la iglesia,  recuerdo que cada vez que asistía a celebraciones, vigilias y grupos de oración me emocionaba con las predicaciones que escuchaba, y siempre al volver a casa le decía al Señor:  “Yo también quiero predicar” “Señor también quiero anunciar esta buena noticia”  “Señor concédeme el don de la predicación” “Señor sueño con ir por todo el mundo anunciando el evangelio” eran mis plegarias constantes.  
Luego, Sin querer queriendo me vi envuelto en esta noble labor de la predicación,  El Señor escucho mis plegarias, di mis primeros pasos  predicando en los grupos de oración y comunidades a las que asistía,  pero mi corazón aun estaba insatisfecho, mi espíritu y mi alma aun pedían más de Dios.   Fu así que empecé a poner mis manos en la computadora,  la buena noticia tenía que ser transmitida por internet a todo el mundo, entonces conseguí mi  licencia de internauta, empecé a navegar por las rutas de Google, Yahoo y Hotmail.  Recuerdo que empecé un día tímidamente escribiendo una reflexión, la cual envié por la ruta interminable del internet,  esta predicación tuvo bastante aceptación por todos los internautas que la recibieron con agrado,  empezaron a llegar los elogios, llegaron las felicitaciones. Recuerdo que ante todo esto lo único que decía era “Es que tengo un socio que me ayuda”  “Mi socio me enseña a  predicar”. Saben a quién me refería cuando decía tengo un socio,  al ESPIRITU SANTO.  Ahí comenzó toda esta locura de la predicación, desde ese momento mi socio y yo formamos  parte de un ministerio el cual lo llamamos “Mensaje con Poder”.  
Este es un momento muy especial para el ministerio “Mensaje con Poder”,  hemos llegado a la predicación numero 300,  en el trayecto de estas predicaciones   me he visto envuelto en muchas batallas,  vinieron pruebas y más pruebas,  los problemas, las tentaciones se multiplicaron, pero en todos esos obstáculos tuve la compañía de mi socio, El Espíritu Santo que me fortalecía, me animaba y me ayudaba a salir victorioso. 
En este momento para gloria del Señor, El ministerio “Mensaje con Poder” cuenta con 3600 suscriptores es decir 3600 “mensajeros”  que reciben y escuchan  los mensajes en más de 30 países. También varias radios de diferentes países están pasando por sus ondas “Mensajes con poder”  Me parece increíble todo lo que hemos logrado hasta este momento. 
 Quiero en este momento de mi vida dar gracias y honor al mejor maestro que he tenido.  Quiero dar testimonio de que  se cumple lo que dijo Jesucristo en Juan 14,26 “En adelante el Espíritu Santo, el Interprete que el Padre les va a enviar en mi Nombre, les enseñara todas las cosas y les recordara todo lo que yo les he dicho” Muchos  me escriben preguntándome ¿de dónde escribe tantas reflexiones?, yo simplemente les digo tengo el mejor maestro, el mejor intérprete que me enseña y recuerda todo lo que Jesucristo dijo. Mi maestro, mi compañero mi socio es “EL ESPIRITU SANTO”.
Quiero dar gracias al señor por “La mansión”, centro católico de evangelización,  en un encuentro internacional del nuevo pentecostés  conocí al Señor, Mi primer maestro en la predicación fue el conocido  predicador colombiano: Fray Nelson
También quiero dar gracias a mi mama que siempre estuvo  y está rezando por mí para que yo no desfallezca en este combate.
Gracias a mis hermanas: Jenny, Bertha y Nancy que en estos años de predicación siempre han estado apoyándome y animándome.
Gracias a las comunidades: “Cristo Redentor”  “Soy feliz Cristo me libero”, en ellas empecé a hablar y comunicar la Buena Noticia.  
Gracias a mis hermanos en la fe: Carmelito, Alfredo, Encarnación, Mary, Mabel, de todos ellos aprendí muchas cosas importantes para este ministerio.
Gracias a Mauricio y José Luis de radio Betania que me invitaron para que pudiera grabar las predicaciones en audio
Gracias a todos los sacerdotes, religiosas, servidores y hermanos  que me escriben  de diferentes países, apoyándome  y animándome.  Sus palabras me comprometen a seguir adelante en esta labor.      
Me siento emocionado, por mi mente solo pasan pensamientos de gratitud para El Señor, tengo solo palabras de alabanzas para El, por haberme confiado este ministerio.  
A todos mis hermanos que reciben los mensajes,  invito a que compartan  la Buena Noticia  de la Salvación. Qued`oR6jsp$s invitaos*e2> sp: compartir en sus diferentes comunidades y grupos de oración todas nuestras predicaciones. 

Oración: Señor,  te alabo y te agradezco  por darme la gracia de anunciar la buena noticia de la salvación,  Gracias por el Espíritu Santo mi socio, mi compañero que me enseña y recuerda todo lo que tu decías.  Señor  te pido que bendigas y protejas este ministerio,  pido gracia y misericordia para seguir comunicando tu palabra,  te pido por todos los que reciban estas predicaciones,  que ellos también puedan convertirse en “mensajeros con poder”. Señor tú conoces mis sueños y aspiraciones, pongo todos mis objetivos en el trono de misericordia, ayúdame  a hacerlos realidad según tu voluntad.   Señor quiero decirte con emoción que tú eres mi único tesoro. Tú eres para mí lo más importante y valioso. ¡TÚ eres para mí: MI SEÑOR, MI REY y MI SALVADOR!  Amen


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