Dicen
que había una cárcel que se llamaba “SIN SALIDA” era una cárcel de máxima
seguridad. Lidubino era el preso 777 de la cárcel “Sin salida”
Cierto día que parecía sin novedad para tan singular prisionero, recibe
una visita inesperada, era un periodista
que estaba haciendo un reportaje acerca de los prisioneros el objetivo era
saber por qué estaban recluidos en la
cárcel “Sin salida” El periodista al entrevistarse con Lidubino le pregunta ¿Por qué está preso? ¿Homicidio?
¿Robo? ¿Por qué? El aludido antes de contestar, observa a su
alrededor como queriendo mostrar al periodista con ello que esta era una cárcel
de máxima seguridad, luego de observar alrededor de la prisión dice muy seguro:
“Estoy
preso por falta de oportunidades para escapar” ningún delito me puede tener encerrado, si aun sigo prisionero, lo estoy porque en esta cárcel de máxima seguridad “faltan oportunidades para escapar”
En la
vida espiritual ¿cuantas cárceles existirán?
Los enemigos de la libertad fabrican y construyen diversas cárceles de
máxima seguridad para tomar prisioneros a los elegidos de Cristo. Podemos concluir que hay una:
-Cárcel donde están los alcohólicos, drogadictos y
lujuriosos.
-Cárceles
donde los adúlteros los fornicarios son hechos prisioneros al tener relaciones
sexuales prohibidas, estos aun cantan el estribillo de la cancion: “en la
cárcel de tu piel estoy preso a voluntad…
-Otra
cárcel aglutina a los que son prisioneros de la ira del odio, los que ansian venganza, los que
buscan la violencia y la guerra
-Hay
quienes están encarcelado en la prisión del orgullo, la vanidad y la envidia
-La
flojera ha construido una cárcel muy particular para los perezosos
-otra
cárcel singular es la prisión donde están los que practican la mentira.
Así hay
diferentes cárceles donde los elegidos de Cristo están presos. Y más de uno cuando le preguntan por qué estas
preso se excusara diciendo como Lidubino el preso 777 de la cárcel: “Sin
Salida’’ “estoy preso por falta de
oportunidades”. Esta es la frase que el enemigo de nuestra alma quiere hacernos
creer, el nos mentaliza que nuestras
prisiones espirituales son difíciles de superar, el nos dirá que es mejor estar en esas
prisiones que estar fuera de ellas.
En el
trayecto hacia la tierra prometida aparecerán diversas prisiones para detener
nuestra travesía de llegar al cielo, pero en todo esto hay una buena
noticia, Cristo viene en nuestro auxilio
para concedernos la herencia de la libertad.
Gálatas 5,1
Cristo nos libero para ser libres.
Manténganse, pues firmes y no se sometan de nuevo al yudo de la
esclavitud.
Gálatas 5,13
“Nuestra vocación, hermanos es la libertad.
Juan 8,31 Jesús
decía a los judíos que habían creído en él: “Ustedes serán verdaderos
discípulos míos si perseveran en mi palabra; entonces conocerán la verdad y la
verdad los hará libres”
Juan 8,36 “Por
tanto, si el Hijo los hace libres, ustedes serán realmente libres.
Por
experiencia puedo afirmarles que Cristo cumple su palabra de hacernos
LIBRES, El Señor constantemente nos
ayuda para obtener la libertad de las diferentes prisiones espirituales en las
que caemos a veces por ignorancia otras tantas lo hacemos como dice el
humorista: “SIN QUERER QUERIENDO” A lo largo de mi caminar con Cristo, El ha
tenido misericordia de mi persona, en todo este tiempo los enemigos de mi alma
han intentado atraparme en diferentes prisiones pero Cristo siempre estuvo a mi
lado para ayudarme y liberarme de todas ellas.
El tema de las cárceles y prisiones
espirituales es un tema muy delicado en la vida del cristiano. Nuestra lucha diaria será buscar siempre como
esquivar o salir de diversas cárceles.
La buena noticia es que Cristo
nos va a Liberar siempre y cuando nosotros queramos ser libres. Hay quienes se acostumbran tanto a la cárcel
que no ven otra solución a sus vidas.
Como paso hace un tiempo atrás con un preso que fue liberado de una cárcel,
una noticia decía asi : “Roba para volver a la cárcel y comer gratis”
Poco
después de salir de la cárcel, un desocupado taiwanés robo una caja de algodón
solo para ser arrestado de nuevo cuando le preguntaron porque lo hizo el respondió:
"no podía olvidar las comidas que servían en la prisión"
La prisión del pecado es así, nos
acostumbramos a las comidas de la prisión espiritual, creemos que ese es el
mejor alimento, y no queremos ser libres, los barrotes del mal nos tienen
doblegados con sus delicias y tentaciones.
Preferimos disfrutar por un momento y sufrir el resto de nuestras
vidas.
Si
hasta hoy hemos vividos prisioneros, este es el día de nuestra liberación, este
es el día en que tenemos que buscar la puerta.
Cristo es la puerta que nos permite salir de las prisiones. Hablando de puertas dicen que un día en esta
cárcel que comentábamos al comienzo la cárcel “Sin Salida” Lidubino por fin
logro huir, el director penitenciario
llama a todos los guardias y los reprende diciendo: “Les dije que vigilaran
todas las salidas” Uno de los guardias
dice: ¡Así lo hicimos Señor, vigilamos todas las puertas de salida, pero el prisionero huyo por una de las puertas de
entrada.
Si eres
prisionero, Cristo es la única puerta para escapar, Cristo es la puerta de
entrada a una nueva vida, una vida libre y abundante. Jesucristo te permite salir, Cristo te libera
en este momento pero tú tienes que utilizar la puerta, recuerda lo que dice el Señor: “Yo
soy la puerta; el que entre por mi estará a salvo; entrara y saldrá y
encontrara alimento’’ “El ladrón solo viene a robar, matar y destruir, mientras
que yo he venido para que tengan vida y la tengan en Abundancia” (Juan
10,9-10) a esto podríamos quizás añadir
que Cristo además de Vida nos da libertad y en abundancia.
Oración:
En este momento cuando hago esta plegaria Señor, estoy prisionero en la cárcel
del pecado, tú conoces las diferentes prisiones en las que estamos
atrapados, Señor tú dices que nuestra
vocación es la libertad, tu nos has
dicho que la única salida a nuestras prisiones eres Tu. En este Día Señor, día de gracia y
misericordia quiero obtener la libertad espiritual, estoy cansado de sufrir Señor, estoy cansado
de ser prisionero, hoy Señor clamo y grito para que vengas en mi auxilio, Señor
abre en este momento las puertas de la cárcel del odio, abre las
puertas de la cárcel del adulterio y fornicación , abre las puertas de la
prisión del alcoholismo y drogadicción, Señor abre las puertas de la cárcel de
la ira, del oído, de la envidia, del orgullo, abre las puertas del pecado en
general, para que podamos salir, Señor haznos libres en este momento, que
podamos salir y divisar esa PUERTA que eres tú, Señor ahora que conocemos que
tu eres la Puerta a la libertad, déjanos entrar por esa puerta, Gracias Señor porque
somos libres, gracias Señor por abrirnos la puerta ahora comenzamos a disfrutar
como dice tu palabra la Vida de Libertad y Vida en Abundancia. ¡SOY LIBRE!
Gracias a Jesucristo que me libro de todas mis prisiones.
Amen
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