El aviso contra incendios de una escuela decía: En caso de incendio, las
clases 1 y 2 deben salir por LA PUERTA
ETERNA (se olvidaron escribir la X)
El fuego es sinónimo de peligro, el fuego es sinónimo de
problemas. Cuando creas que tu vida es amenazada por los peligros, cuando tus
días transcurren en un voraz incendio de calores y sinsabores, ante un eventual incendio hay una puerta
eterna, Jesucristo es esa puerta que conduce a lugares maravillosos que el ojo
humano jamás ha visto,
Yo no sé qué incendio hay en tu vida, yo no sé qué
problemas y dificultades estés pasando, pero si conozco y sé que en tiempo de
zozobra y caos hay una salida, en tiempos de calamidad hay una puerta ETERNA,
por donde pueden salir niños jóvenes, mayores ancianos, por esta puerta pueden
pasar ricos y pobres, gordos y flacos, altos y bajos.
Yo soy la puerta: el que por
mí entre, se salvará. Podrá entrar y salir y encontrará todo lo que necesita.
(Juan 10,9)
Volviendo al letrero de advertencia de la escuela lo
correcto era puerta EXTERNA, y no eterna, pero este error nos deja la enseñanza
que muchas veces cuando nos vemos
envueltos en problemas buscamos la puerta externa, es decir buscamos la solución
en lo que está afuera, y no nos damos cuenta que la solución está en lo
interior está en nuestro corazón, la puerta ETERNA la podremos encontrar buscando y recibiendo a Cristo en nuestro corazón.
La puerta externa te conducirá al alcohol y a todo tipo
de vicios
La puerta externa te llevara al adulterio y placeres de
la carne
La puerta externa te llevara a ambicionar bienes riquezas
y cosas materiales
La puerta externa te hará buscar soluciones terrenales y
finitas
Sin embargo la puerta eterna te conducirá a la pureza
La puerta eterna te mostrara el camino de la fidelidad
La puerta eterna te enseñara a ambicionar y desear las
cosas del cielo
La puerta eterna nos ofrece soluciones permanentes e
infinitas.
En caso de un eventual incendio en tu vida que puerta
buscaras
La puerta externa o LA PUERTA ETERNA…
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