“
¿Tavito dame un sinónimo de promesa?
Al instante el niño responde:
¡Engaño!, profesora
Engaño no es sinónimo de promesa dice la maestra
El niño insiste diciendo: ¡Como que no! Usted no cumplió
con su promesa, nos engañó a todos dijo que las pruebas solamente iban a ser
escritas no orales…
¿Cuantas promesas hechas a Dios?
Promesa es una propuesta que le hacemos a Dios
Promesa es un compromiso con Dios
Promesa es un pacto que hacemos con Dios
Pero muchas veces, nos excusamos ante Dios, así como el
niño de la historia cambiamos la palabra
promesa por la palabra engaño, pues engañamos a Dios, al no cumplir lo que le
prometimos hacer.
Recuerda que cuando
estabas en peligro, cuando estabas enfermo, cuando estabas pasando por el dolor
y sufrimiento tú hiciste promesas y más promesas a Dios, para que El viniera en
tu auxilio. Recuerda que Él te ayudo, Dios cumplió sus promesas, Dios te saco
del peligro, Dios restauro tu vida,
Si Dios cumplió sus
promesas ¿Por qué? Tú no cumpliste con El, ¿Porque tú fallaste a tus
compromisos?
Prometimos no mentir y
mentimos
Prometimos no tener malos
pensamientos y no cumplimos
Prometimos dejar los
vicios y nada
Prometimos alejarnos de
la lujuria y adulterio y no lo hicimos
Prometimos dejar el odio
y rencor, prometimos perdonar y no lo hemos hecho
En Fin cuantas promesas y
más promesas de cambiar nuestra vida incumplidas.
Hoy es el día propicio
para renovar el pacto hecho con Dios
Hoy mis amigos renovemos
nuestras promesas,
Hoy mis hermanos en la fe
esforcémonos por cumplir nuestro compromiso con Dios
Recuerda siempre que
sinónimo de promesa no es engaño.
Sinónimo de promesa será
siempre un ofrecimiento, un convenio, un compromiso, un deber y un Pacto.
Los que prometen
dar y nunca lo hacen son como nubes y vientos que no traen lluvia. (Proverbios
25,14)
Dios no necesita
nada de nosotros, pero el mejor sinónimo de promesa que le podemos dar es entregarle nuestro corazón.
El mayor sinónimo
de promesa será: “Amar a Dios con todo el corazón con toda tu alma, con toda tu mente y
con todas tus fuerzas.” (Marcos 12.30) Amen
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