En la
iglesia, una joven pareja se aprestaban a contraer matrimonio, el novio estaba
tan emocionado que comienza a llorar, Lidubina
la tía del novio al ver esta emotiva escena pregunta a su esposo: ¿Porque no lloraste
en nuestro casamiento? El sonriendo
dice, lo hubiese hecho, hubiera llorado mucho, muchísimo si hubiera sabido lo que me esperaba...
Al decir ¡Sí! En el altar lo decimos con una alegría y
emoción que creemos durara por
siempre, pero luego pasa la luna de
miel, pasan los días meses y años y el amor que creímos iba a ser permanente se va terminando.
Ya no existe la canción “te amare toda la vida”…
Quizás más de uno la hemos cambiado por un “te odiare
toda la vida”…
La triste realidad de los matrimonios hoy por hoy es
que cada vez más y más parejas optan por: “LA SEPARACION y EL DIVORCIO”.
La buena noticia para los matrimonios que atraviesan
una crisis, es que Jesucristo que realizo
el primer milagro en un matrimonio (las boda de Cana) hace 2000 años atrás,
quiere repetir el milagro hoy en tu matrimonio.
Lee con atención el siguiente pasaje de la sagrada
escritura:
“Tres días más tarde se celebraba una boda en Caná de Galilea, y
la madre de Jesús estaba allí. También fue invitado Jesús a la boda con sus discípulos. Sucedió que
se terminó el vino preparado para la boda, y se quedaron sin vino. Entonces la
madre de Jesús le dijo: «No tienen vino.”. Jesús le
respondió: «Mujer, ¿por qué te metes en mis asuntos? Aún no ha llegado mi hora.
“Pero su madre dijo a los sirvientes: «Hagan lo que él les diga.»
De este pasaje bíblico tenemos que
aprender tres lecciones para nuestros matrimonios
1) Invitar a Jesús
a nuestro matrimonio (Jn 2,2)
2) También invitar
a la madre de Jesús (Jn 2,1)
3) Obedecer al
Señor (Jn 2,5)
Si tu matrimonio pasa por dificultades,
si tu matrimonio está en crisis, no
pierdas la fe, no pierdas la esperanza,
ya no luches sola (o), Invita a Cristo que él sea el padrino y consejero
matrimonial, invita a María que ella sea
tu madrina y consejera matrimonial, y lo más importante a partir de hoy ama y
OBEDECE AL SEÑOR…
Oración:
Señor hoy con dolor y tristeza te digo: “mi matrimonio está en crisis” “mi
matrimonio está en peligro”, Señor cometimos el error de no tomarte en cuenta en nuestro
matrimonio, pero hoy arrepentido(a) me dirijo a ti para invitarte que vengas a
salvar mi matrimonio, Señor ayúdame, Señor
con pena te digo: “se terminó el vino de la alegría” se acabó el vino de
la confianza” “se acabó el vino de la fidelidad” se ha acabado el vino Señor en
mi matrimonio, Señor creo que todo es posible para ti, por eso te decimos con
Fe, Convierte, transforma renueva y SALVA LOS MATRIMONIOS.
Amen
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